El humano más rico no es el que más tiene, sino el que menos necesita. La riqueza es una forma de pensar. Quiere menos y aprecia más.

En la temporada navideña, inevitablemente hemos sido bombardeados con anuncios llamativos y guías de compra de obsequios que defienden los últimos y mejores dispositivos, joyas, automóviles y más.

Y aunque no estoy en contra de invertir en nuevos productos que agreguen valor a nuestras vidas, no me gusta escuchar que la gente piensa que “necesitan” un montón de cosas nuevas y caras para ser felices.

En verdad, a menos que estemos invirtiendo en nuestro crecimiento personal y tomando medidas, la mayor parte del dinero que gastamos en cosas no nos hace más felices o mejores a largo plazo.

Simplemente no necesitamos más artículos elegantes en nuestros armarios que acumulan polvo para encontrar alegría y satisfacción.

De hecho, podemos encontrar la mayor parte de lo que buscamos si prestamos más atención a los regalos que ya tenemos frente a nosotros: los momentos simples pero hermosos que nos hacen sonreír …

 

40 momentos simples

40 momentos simples

  1. Una mañana tranquila.
  2. Un abrazo de alguien a quien amas.
  3. Beber una taza de café o té caliente.
  4. Leer algunas páginas de uno de esos buenos libros que hay en tu estantería.
  5. Aprendiendo una nueva habilidad por ti mismo.
  6. Sintiendo el ardor después de una caminata rápida alrededor de la manzana.
  7. La risa de un niño.
  8. Alguien especial que quiera tu atención.
  9. Poder sentarse con un verdadero amigo, cómodamente en silencio.
  10. Reírse de viejas fotos familiares.
  11. El momento justo después de que se cierra la puerta principal y de repente tienes toda la casa para ti.
  12. Caminando por tu casa y admirándola justo después de terminar de limpiarla.
  13. El olor de una comida casera.
  14. Lanzar alimentos al aire y atraparlos con la boca.
  15. Escuchar una canción que te conmueva.
  16. Cuando haces contacto visual con alguien del otro lado de la habitación y ambos sonríen automáticamente.
  17. Tener una conversación interesante con un completo desconocido.
  18. Descubrir que otros están experimentando el mismo problema que tu y finalmente saber que no estás solo.
  19. La satisfactoria sensación de hacer lo correcto.
  20. Mirando hacia el cielo en una noche realmente clara y viendo nada más que estrellas.
  21. Ese primer indicio de una brisa fresca al final de un verano caluroso.
  22. El crepitar de una chimenea en una fría noche de invierno.
  23. Levantarse rápidamente para ir al baño por la mañana y luego volver a meterse bajo las sábanas en el mismo lugar cálido y acogedor.
  24. Compartir un paraguas con otra persona.
  25. La calma pacífica justo después de una fuerte tormenta o nevada.
  26. Caminando descalzo sobre la hierba.
  27. Escuchar la brisa que sopla entre los árboles.
  28. Cuando el tráfico en las calles es ligero y llegas a casa más rápido de lo habitual.
  29. Dándote cuenta de que estás en la caja más rápida en el supermercado.
  30. Meditar por la mañana. Prueba uno de nuestras meditaciones guíadas!
  31. El silencio en la parte trasera de la biblioteca de tu ciudad local.
  32. Cuando un extraño se ofrece a tomar una foto para que tu y tus amigos salgáis juntos en la foto.
  33. La alegría de mirar una foto tuya y amarla.
  34. Acariciar un cachorro
  35. Lograr un objetivo por el que hayas trabajado de manera gradual y diligente.
  36. Poder contarle a alguien buenas noticias.
  37. Saber en el fondo que has marcado una diferencia en la vida de alguien.
  38. La sensación agridulce de terminar un libro realmente bueno.
  39. Dormir junto a alguien a quien realmente amas.
  40. Quedarse dormido tan pronto como te acuestes.

acariciar cachorro

 

Estar presente … y agradecido

Ahora mismo, es el momento de “. . . ”

Ese espacio en blanco denotado por “. . . ” no es un error. Ese espacio representa una necesidad actual de silencio.

El silencio es espacio. El silencio trae consciencia.

Cuanto más silencioso estés, más podrás oírte a tí mismo pensar y más podrás apreciar la bondad que ya es tuya.

En algún lugar profundo de tu interior, sabes que esto es cierto. Piensa por un momento.

¿Con qué frecuencia has experimentado uno de los 40 “momentos perfectos” mencionados arriba?

¿Y con qué frecuencia te has olvidado de apreciar un momento así?

Si la respuesta es “con demasiada frecuencia”, está bien. Todos olvidamos a veces. Deja que esta publicación te sirva como un recordatorio positivo.

En última instancia, la clave es dejar suficiente espacio en tu vida para disfrutar del espacio entre los eventos más importantes.

Tomar una respiración profunda.

Mira alrededor.

Y da las gracias.

 

abrazar alguien 40 momentos simples

 

Conclusión

Incluso si la vida te está dando todas las razones para ser negativo en este momento, piensa en una buena razón para ser positivo.

Tal vez no puedes hacer todo lo que está en la lista anterior en este momento, pero puedes hacer algunas de ellas …

¡Siempre hay algo por lo que estar agradecido!

¿Cuál es un momento reciente de tu vida por el que estás agradecido?

¿Tienes otros pensamientos sobre la gratitud para compartir?

Nos encantaría saber de TI. Déjanos un comentario! Nos encanta leeros!

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